Los interioristas londinenses Emma Graham y Wilson Carter se trasladaron a Essaouira, Marruecos hace unos diez años, allí compraron un riad del siglo 18 dentro de las murallas de la medina y lo convirtieron en esta maravillosa casa. Cuenta con un estilo muy propio del lugar donde se encuentra mezclado con piezas pop-art de plástico. Como buena casa árabe está construida alrededor de un patio central, tiene columnas de piedra arenisca y techos de madera. El edificio de cuatro plantas de alto, cuenta con espacios perfectamente equipados con mobiliario ecléctico en su mayoría de los años 60, creando ambientes llenos de magia en los que se mezcla el exotismo musulman y los muebles de estilo retro.
Y la vuelta de cada esquina redondeada hay una hamaca, una chimenea o un área de descanso al aire libre dispuesto a ser disfrutado.
Imágenes Vía: NY Times, Castels in the Sad
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